Me gustas cuando dices tonterías, cuando metes la pata, cuando mientes, cuando te vas de charla con tus amigos y llego tarde al cine por tu culpa.

Me gustas mas cuando es mi cumpleaños y me cubres de besos y de tartas, o cuando eres feliz y se te nota, o cuando eres genial con una frase que lo resume todo, o cuando ríes, tu risa es una ducha en el infierno, o cuando me perdonas un olvido.

Pero aun me gustas mas, tanto que casi no puedo resistir lo que me gustas, cuando, lleno de vida, te despiertas y lo primero que haces es decirme: “Tengo un hambre feroz esta mañana. Voy a empezar contigo el desayuno”.